México.- Un muerto, dos heridos y dos "levantados", fue el saldo de un ataque armado contra policías comunitarios de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) en el poblado de Palo Blanco, del municipio de Chilpancingo.

La noche de este martes, un grupo de personas fuertemente armado irrumpió en dicho poblado y atacaron la comandancia de la UPOEG, así como la casa del comandante a quien apodan "El Yoni".

De acuerdo con información de las autoridades, el ataque y enfrentamiento dio inicio sobre la carretera federal México-Acapulco, a la altura del poblado de Palo Blanco, municipio de Chilpancingo.

El enfrentamiento duró varios minutos pasadas las 21:30 horas, lo que provocó que habitantes de dicho poblado entraran en pánico y se encerraran en sus viviendas.

Tras la refriega, el hombre que perdió la vida fue identificado como Luciano "N", de 25 a 35 años de edad originario del poblado de Acahuizotla, municipio de Chilpancingo, cuyo cuerpo quedó en los asientos traseros de un vehículo Nissan, tipo Tsuru que quedó sobre la carretera.

Las otras dos personas que resultaron heridas responden a los nombres de, Moisés "N", de 22 años y Bryan "N", de 17 años de edad, originarios de Mazatlán y Palo Blanco, pertenecientes a Chilpancingo, quienes presentaban impactos de bala en las piernas.

Al poblado acudieron elementos de diversas corporaciones policíacas y efectivos del Ejército mexicano, quienes se encargaron de realizar operativos en los diferentes poblados para localizar a los integrantes del grupo armado que irrumpió.

Además, integrantes de la Policía Comunitaria de la UPOEG reportaron que otras dos personas fueron privadas de su libertad por el grupo armado, de quienes hasta ahora se desconoce su paradero.

Los grupos de autodefensa se han empezado a reorganizar para iniciar con la búsqueda de los desaparecidos, generando horas de tensión en el corredor que va de Chilpancingo al Puerto de Acapulco.

En por lo menos siete pueblos del municipio de Chilpancingo, las actividades escolares en todos los niveles se encuentran suspendidas, ante el temor de que se desencadenen enfrentamientos armados.