México.- A casi tres años de la desaparición forzada de los 43 estudiantes de Ayotzinapa, y sin avances en la investigación del caso por parte de la PGR, padres y madres protestaron en el 27 Batallón de Infantería del Ejército con sede en Iguala, mientras que normalistas arremetieron con piedras y cohetones.

Este 26 y 27 de septiembre se cumple tres años del asesinato de tres jóvenes y la desaparición forzada de los 43, a manos de las fuerzas policiacas, y a pesar de la exigencia de investigadores independientes, padres y organizaciones, la Procuraduría General de la República, no investiga la probable participación del Ejército.

Como parte de la jornada de lucha, que por la contingencia del sismo se suspenderá en la Ciudad de México, normalistas acudieron a Iguala, para reiterar su repudio a las fuerzas castrenses, a quienes acusan de haber participado en la cacería de estudiantes, la noche de Iguala.

Los padres realizaron un mitin en el acceso al 27 Batallón, donde se han instalado portones reforzados de acero a raíz de las protestas, reclamaron la omisión y colusión con el crimen organizado en la zona norte del estado, donde actuaba con total impunidad el grupo criminal “Guerreros Unidos”.

Tras el mitin, los estudiantes, unos 200 aproximadamente arremetieron contra esta sede militar, escenario de otros ataques, lanzando cohetones, piedras y bombas molotov; mientras que los militares también respondieron con piedras desde el interior del inmueble.

El ataque, duró unos 15 minutos, y luego los normalistas tomaron sus autobuses y retornaron a su escuela, en la Ciudad de Tixtla, sólo vigilados por elementos de la Policía Estatal y Policía Federal, que en ningún momento intervinieron.

No se registraron manifestantes o militares lesionados, pero si el reportero Jesús Saavedra, del diario “El Sol de Chilpancingo”, quien fue alcanzado por una piedra proveniente del interior del cuartel, que le impactó en la cabeza y le provocó una herida leve.