Saltillo.- La noticia de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) revocará el dictamen del Instituto Nacional Electoral (INE) sobre el rebase del tope de gastos de campaña del candidato del PRI al gobierno del estado, Miguel Riquelme, atizó la hoguera del conflicto poselectoral. “Reforma”, en su edición de hoy, dice que en un proyecto de sentencia que circula entre los magistrados se “desconoce el acuerdo del INE de sumarle un pago de Facebook por 1.2 millones de pesos como gasto de campaña del abanderado priista”.

Originalmente, la Unidad Técnica de Fiscalización (UTF) del INE le atribuyó a Riquelme un gasto 7.8 por ciento por encima de los 19.2 millones de pesos autorizados por el Código Electoral del Estado para las campañas de gobernador. De acuerdo con la Constitución, cuando el rebase es mayor al cinco por ciento y la diferencia entre el primero y el segundo lugar de los candidatos más votados es menor a ese mismo porcentaje (Riquelme aventajó al panista Guillermo Anaya por 2.4%), la elección debe anularse y el infractor ser excluido del proceso extraordinario.

El 17 de julio, el INE anunció que “De una primera revisión a los engroses, la Unidad Técnica de Fiscalización (UTF) ha detectado que, en el estado de Coahuila, la Coalición Por un Coahuila Seguro, encabezada por Miguel Riquelme, rebasó el tope de gastos de campaña por 7.8 por ciento, mientras que, en la Coalición Alianza Ciudadana por Coahuila, abanderada por Guillermo Anaya, el rebase fue equivalente al 4.56 por ciento”. Ciro Murayama, Pamela San Martín y otros consejeros apoyaron el dictamen.

Sin embargo, de acuerdo con la información del grupo Reforma, el proyecto de la ministra Janine Otárola, presidente del TEPJF, reduce el sobregasto de Riquelme en 6.2 por ciento, para dejarlo en 1.6, lo cual despejaría el camino para que el priista rindiera protesta como gobernador el próximo 1 de diciembre.

La respuesta de los excandidatos Guillermo Anaya, Armando Guadiana, Javier Guerrero, Luis Horacio Salinas y José Ángel Pérez, agrupados desde el 5 de junio en el Frente por la Dignidad de Coahuila (FDC), fue inmediata: “El INE debe estar resolviendo muy pronto la queja 141, misma que estimamos ponga a Riquelme arriba del 20% de rebase del tope de gastos de campaña”, aseguran en un comunicado. Apenas el lunes, Anaya, Guadiana y Guerrero se reunieron con la presidente del TEPJF para exponer “los argumentos de nulidad de la elección de gobernador en Coahuila”.

Los excandidatos advierten que “con ese nuevo incremento y con lo establecido en el Artículo 41 Constitucional, que expresa que debe anularse la elección cuando el gasto de campaña exceda 5 por ciento del monto total autorizado (…) en Coahuila habrá nuevas elecciones (…) y Riquelme no será gobernador”. Asimismo, reprobaron que la filtración a Reforma “se haya dado justamente el mismo día que el Frente por la Dignidad de Coahuila se presentó ante los magistrados del Tribunal Electoral Federal, lo que representa una clara señal de que hay fuertes presiones para que se avale el fraude electoral del PRI-Gobierno”.

Efectivamente, la Comisión de Fiscalización del INE fijó hoy en 2 millones 023 mil pesos el rebase acumulado por Miguel Riquelme —equivalente al 10.5 por ciento del tope legal—, pues omitió pagos por 501 mil pesos a sus representantes de casilla. Pero también elevó de 4.6 a 8.7 por ciento el exceso de gastos de Guillermo Anaya. En ese escenario, ninguno podría participar en la elección extraordinaria de gobernador. El INE puso al TEPJF contra la pared.

En medio de la batahola, el senador Luis Fernando Salazar (PAN) saltó a la palestra para acusar a los integrantes de sala superior del TEPJF de asumir “el papel de abogados del PRI. Este Tribunal, tan claramente parcial, no puede ser quien juzgue la próxima elección presidencial”. Advirtió que “por presión del presidente Peña Nieto, del gobernador Moreira o incluso por su misma afiliación partidista (los magistrados) están pasando por alto el principio y valores de la democracia, con tal de perpetrar a como dé lugar un fraude electoral del que estamos siendo víctimas todos los coahuilenses”.