Cuernavaca, Morelos.- José Mar Flores Pereyra, el pastor religioso que en el año 2009 intentó secuestrar un avión de Aeromexico, valiéndose de dos botes de jugo, un teléfono celular, cables y unas luces, con las cuales simuló tener un artefacto explosivo, mismo que amenazaba con hacer estallar si no le concedían una entrevista personal con Felipe Calderón, entonces presidente de México.

Luego de cumplir con cinco años de reclusión en el Centro Federal de Rehabilitación Psicosocial (CEFEREPSI), con sede en el municipio de Ayala, al oriente de Morelos, José Mar Flores ?Josmar?, el pastor de origen boliviano salió en libertad esta madrugada.

Luego de su frustrado intentó por reunirse con el presidente, la justicia federal lo condenó a cuatro años de tratamiento en el CEFEREPSI de Ayala, cuya prisión abandonó hoy.

Una versión extraoficial señaló que Josmar logró su libertad al obtener la protección de la justicia federal. Ya que alegó que había cumplido con su sentencia de cuatro años de terapia y por lo tanto tenía derecho a la libertad, debido a que fue recluido desde septiembre de 2009.

El 9 de septiembre de 2009, el pastor amagó con secuestrar el avión de Aeromexico, y detonar dos supuestos explosivos que llevaba consigo en el vuelo con más de 100 pasajeros, cuya ruta de vuelo era Cancún-Ciudad de México.

Luego de ser detenido, el boliviano explicó que había tenido una revelación divina, por lo que pretendía advertir al presidente sobre un gran terremoto que se acercaba. ?Era un mensaje de Dios?.

También dijo que su acto se debió a que ese día marcaban los números 9-9-9, es decir, 9 de septiembre de 2009, lo que supone -según las supersticiones- un día aciago porque a la inversa es el 6-6-6, el "día de la bestia".