Los Cabos, BCS.  El delito de trata de personas que originó un operativo encabezado por la Procuraduría General de la República en Los Cabos, el pasado 12 de marzo, ya no existe.

Las 26 mujeres que originaron el rescate por el delito de explotación sexual son trabajadoras sexuales contratadas para una fiesta privada, indicó el Semanario Zeta. Cada una de las mujeres, de pronto, aceptó que sí ofrecían sexo como servicio, por lo que el delito por el que encerraron a cinco sujetos, se transformó en lenocinio.

Sí, las cinco personas capturadas solo se encargaron de “facilitar una relación amorosa o sexual entre dos personas” a cambio de dinero.  

El lenocinio se pude inculcar e inducir por medio de amenazas, promesas o hasta simplemente con palabras con el fin de que una persona acepte satisfacer los deseos sexuales de otra en particular. 

El artículo 207, fracción I, del Código Penal, establece que “comete el delito de lenocinio, toda persona que habitual o accidentalmente explote el cuerpo de otra por medio del comercio carnal, se mantenga de este comercio u obtenga de él un lucro cualquiera, y la parte final de este precepto debe interpretarse con un criterio estrictamente jurídico, en el sentido de que el lucro a que se refiere, debe obtenerse de modo preciso del acto carnal mismo y no por otro concepto".

Por eso, la PGR envió el caso a la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), y se abrió la averiguación previa CSL/005/HOM/2016 por el delito de lenocinio.

El Semanario Zeta detalló que las mujeres fueron contratadas bajo diferentes tarifas que iban de los mil 500 hasta los 7 mil pesos por los servicios que de escort, a domicilio y ejecutivo.

El medio de comunicación tijuanense informó que no se trató de ningún “rescate de víctimas de explotación sexual”.

Con información de Colectivo Pericú y Semanario Zeta