México.- La renuncia como gobernador de Baja California Sur ante la ola de violencia, Carlos Mendoza Davis la tiene fuera de toda visión.

“Tengo un compromiso con Baja California Sur y cuando más hay que trabajar es en momentos de crisis”, dijo el mandatario estatal, quien acudió al funeral de Silvestre de la Toba Camacho, presidente de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), y de su hijo Fernando de la Toba Lucero.

Tras externar sus condolencias a la familia, Mendoza Davis se comprometió a que no habrá impunidad en este crimen cometido el lunes pasado en un ataque en el que resultaron heridas la esposa e hija del ombudsman sudcaliforniano.

Afirmo que como gobernador no rehuye a su responsabilidad y continuará en la línea que se propuso de generar mejores policías e instituciones, así como mayor nivel de coordinación entre las instancias de seguridad para dar resultados.

De acuerdo con La Jornada, dijo que la muerte del presidente de la CEDH le dolía en el alma ya que era su amigo y le pidió que no perdiera la esperanza de resolver este crimen y regresar la tranquilidad y seguridad a Baja California Sur.