Un reporte publicado este jueves por el Washington Post señala que de acuerdo a los resultados de la autopsia practicado en el cuerpo del millonario Jeffrey Epstein, preso bajo cargos de abuso y tráfico sexual de menores, se encontraron múltiples fracturas en la zona del cuello.

El diario norteamericano señaló que una consulta realizada con expertos forenses arrojó que estas fracturas en el cuello pueden ocurrir en algunos casos de suicidio, aunque se presentan más comúnmente en el caso de asesinatos por estrangulación.

Se trata de una irregularidad más en la muerte del magnate que se encontraba bajo custodia federal y que debía ser monitoreado al menos cada media hora por un grupo de guardias que violaron los protocolos establecidos en la cárcel federal de Manhattan en donde se encontraba recluido.

La autopsia habría sido terminada el mismo domingo, día en que se encontró el cuerpo de Epstein en su celda, y se llevó a cabo por la examinadora médica en jefe de Nueva York, Barbara Sampson.

Sin embargo, el resultado no se dio a conocer hasta este martes, presuntamente porque la investigación de las circunstancias de la muerte del detenido se encontraban en curso. Pese a versiones adelantadas en medios de un presunto suicidio del detenido, Sampson señaló que la causa del deceso se mantenía como “pendiente”.

Otra irregularidad en el fallecimiento de Jeffrey Epstein ocurrió en el caso del reclamo del cuerpo, ya que se desconoce quién terminó por llevarse el cadáver.

La persona que se quedó con el cadáver únicamente fue identificado como “un asociado de Epstein”, sin que se dieran más detalles.

Las circunstancias sin aclarar en las que se dio el fallecimiento del personaje que durante décadas tuvo entre sus contactos a varias de las principales figuras de la política y la economía a nivel mundial, han dado rienda suelta a toda clase de teorías de conspiración en redes sociales y en medios, mismas que han sido compartidas incluso por el propio Donald Trump.