La familia de Marlen Ochoa-López, una adolescente hispana de 19 años que fue asesinada en abril pasado para arrebatar el producto de su embarazo, informó que el bebé falleció después de semanas de estar en soporte vital.

Según un comunicado enviado por un portavoz de la familia, Yovanny Jadiel López falleció el viernes por la mañana; se encontraba en cuidados intensivos con daño cerebral grave desde que llegó al hospital.

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La madre del bebé habría sido asesinada por Clarissa Figueroa y su hija Desiree, quienes la atrajeron a una casa en el barrio South Side de Chicago, donde le extrajeron el bebé que hasta entonces tenía ya nueve meses de gestación. 

Prometieron regalarle ropa para el bebé

Clarissa, de 48 años, prometió a Marlen regalarle ropa para el bebé, pero una vez que llegó a su hogar la estranguló y extrajo el bebé, aunque el producto tuvo complicaciones para respirar y terminó acudiendo los servicios de emergencias.

La mujer reportó al personal del Hospital Christ que había dado luz al niño en su casa, pero después se demostró lo contrario a través de una prueba de ADN; Clarissa y Desiree, de 24 años, fueron acusadas de asesinato en primer grado, mientras que el novio de Clarissa, Piotr Bobak, fue acusado de encubrir el homicidio.

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El abogado del esposo de Ochoa-López, Yovani López, pidió al condado de Cook que presentará más cargos en contra de los tres señalados al causarle un daño cerebral grave al bebé, quien según los médicos no tenía oxígeno cuando su madre fue estrangulada.

Con información de WGN TV.