México.- Mientras en México organizaciones de la sociedad civil como la Alianza por la Salud Alimentaria quieren lucrar con la desgracia de los terremotos y aumentar el IEPS a los refrescos para la reconstrucción de las poblaciones afectadas. En el condado de Cook, Chicago, Estados Unidos, se anuló la semana pasada el impuesto de un centavo de dólar por cada onza de las bebidas azucaradas, al señalar que ha enfrentado la oposición de casi el 80 por ciento de la ciudadanía. La decisión entrará en vigor el próximo 1 de diciembre y pone fin a un impuesto poco popular que inició el pasado 1 de agosto y que vio subir los precios de las bebidas a pesar del enojo de los consumidores. Hasta la fecha, este impuesto ha recaudado 16 millones de dólares de los 200 millones de dólares que necesita el condado para equilibrar el presupuesto.

"Los residentes del condado de Cook enviaron un fuerte mensaje sobre la manera que quieren que equilibremos el presupuesto", afirmó el comisionado Jesús García, que hace un año favoreció el impuesto. García explicó que cambió de opinión al observar que los residentes y pequeños comerciantes también cambiaron de parecer. El impuesto había sido promocionado por la presidente de los comisionados del condado Cook, Toni Preckwinkle, para combatir el consumo de bebidas azucaradas, especialmente entre las minorías, las cuales padecen de altos niveles de obesidad y diabetes.

Incluso el exalcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, contribuyó con más de dos millones de dólares para efectuar una campaña publicitaria para que los residentes apoyaran el impuesto y dejaran de consumir estas bebidas. Durante la audiencia de este martes, más de 150 personas se aglutinaron en la sala de los comisionados. "Yo he visto un grande impacto negativo en las ventas de nuestras bebidas en mi ruta", se quejó Matt Dixon, un distribuidor de esta bebidas. Impuestos similares han sido implementados este año en Seattle,Washington, y Filadelfia, Pensilvania.