Estados Unidos.- Luego de que un avión SU-22 de la fuerza aérea Siria fuera derribado por fuerzas norteamericanas, las tensiones entre las potencias militares y sus aliados siguen incrementándose. 

Este se trata únicamente del incidente más reciente entre las fuerzas militares que presuntamente combaten al Estado Islámico en territorio sirio.

Pese a la retórica de ciertos segmentos del ejército norteamericano, quienes se han apresurado a desescalar la delicada situación, el Ministerio de Defensa Ruso lanzó una dura advertencia contra los estadounidenses.

“Todos los objetos voladores detectados al oeste del Eufrátes serán seguidos por los sistema de defensas rusos como objetivos”, señaló el comunicado.

Por su parte, el Pentágono advirtió que seguirán con su campaña de bombardeos contra el Estado Islámico en territorio sirio.