Liz Parrish, científica estadounidense, se prestó a un un experimento con el cual alteró sus genes, volviéndose un poco más joven. Así es, el gran deseo de la humanidad, el poder ganarle al tiempo podría ser una realidad gracias a este proyecto.

El experimento consistió en introducir material genético en el núcleo de sus células, los cuales realizan una serie de cambios que detienen que revierten el proceso de envejecimiento. Parrish está consciente de que esto también puede traerle algunos problemas a su salud; pero el riesgo lo vale si en el futuro puede ayudar a las personas, además de ser un parteaguas en el avance biotecnológico.

Ella forma parte de la International Longevity Alliance y es fundadora de BioTrove Investments LLC y BioTrove Podcasts; todas dedicadas al estudio de la medicina regenerativa.

Con información de RT.