Ni mujeres ni hombres vemos a las mujeres y a los hombres por igual. Para Rosa Montero, ambos géneros valoran más al hombre porque la ideología machista es una costumbre con la que nos han educado a todos. 

Las mujeres machistas viven bajo prejuicios que no se ven, pero que allí están. Los prejuicios son parásitos del pensamiento, no se notan. Y si hay mujeres machistas, ¿no deberían entonces las feministas llamarse mejor "anti-sexistas"?, como recomienda la periodista madrileña. 

Puedes leer: #MeToo denuncia intento de censura tras muerte de Armando Vega Gil

¿Y si mejor lo llamamos "anti-sexismo"?

Esta palabra (feminista) sí que es hermosa para Montero y para muchas personas más, sean hombres o mujeres, pero la escritora reconoce que debe reivindicarse porque en los últimos años ha resultado equívoca, a pesar de tener un peso histórico por un puñado de generaciones. 

El feminismo lucha por la igualdad entre los dos géneros, pero portando esta bandera, una minoría lo ha señalado como el movimiento de odio contra los hombres. Y, erróneamente, han confundido a miles.

Puedes leer: No es posible defender los Derechos Humanos sin ser feminista

La vida y la realidad de los hombres también está en juego

Pero a Rosa no. Ella, que viajó a México para presentar su más reciente creación: Los tiempos del odio, en el Centro de Cultura Casa Lamm de la colonia Roma, sabe que esta mala interpretación quita armas a lo lógico, porque es lógico que todos seamos feministas o "anti-sexistas".

A decir de la autora de La ridícula idea de no volver a verte y La loca de la casa, hemos salido de las cavernas, ahora nos parece que vamos más despacio pero la velocidad en la que los hombres se están dando cuenta de que su papel, su vida y su realidad también está en juego, es tremebunda. 

Puedes leer: Lanzan #MeTooEscritoresMexicanos para señalar abusos, acoso y violencia

"En un mundo tan violento te tienes que defender"

Ellos, por ejemplo, ahora saben que que no tienen que defender a un violador porque no tiene nada que ver con ellos. El feminismo goza hoy de la incorporación multitudinaria de los hombres.

Estamos reaccionando a los tiempos del odio, "en un mundo tan violento te tienes que defender", y en toda esta vorágine también existen (y es muy fácil de verlos) aquellos que quieren combatir este cambio profundo.

Puedes leer: Tiene violencia hacia la mujer su pico más alto de los últimos años

Hemos cambiado al mundo con 4 o 5 generaciones 

Pero recordemos que las mujeres no hemos podido votar hasta mediados del siglo XX; en México fue hasta 1955. No hemos podido estudiar en las Universidades hasta principios del mismo XX. Como dice Montero, en los últimos tres años el movimiento "anti-sexista" ha dado un paso que puede verse como un escalón en la historia.

Y un escalón en la historia parece algo pequeño que, desde una vista lejana, es mayúsculo. La historia siempre avanza de una manera pendular, lo que sigue después es volver a subir.