El Festival de Música de Hielo se lleva a cabo cada año en un pueblo llamado Finse, al oeste de Oslo, Noruega, donde la temperatura llega hasta 24 grado bajo cero y las montañas del paisaje acompañan a los músicos en un concierto helado.

Pero este no es un festival común y corriente, ya que los músicos tocan instrumentos hechos de hielo, en un anfiteatro que es un iglú. El director utiliza láminas de hielo que golpea levemente y suenan cual xilófono, y los demás artistas comienzan a tocar sus instrumentos de hielo, que emiten un sonido especial por su estructura o cuando entran en contacto con las manos, aliento o viento que sopla dentro del iglú.  "No se imagina lo difícil que es tocar instrumentos que se van derritiendo", comenta uno de los músicos a la AFP, además de que añaden que es realmente desafiante tocar instrumentos que se pueden romper en cualquier momento, pero justamente este tipo de detalles es lo que más atrae al público, ya que es muy natural.

Es uno de los eventos más esperados del año en el ámbito músical y cambia la perspectiva que muchos tienen de la música tradicional de orquesta. Esto es algo nunca antes visto.

Foto: Jonathan Nackstrand / AFP