México.- El muralista y activista Héctor Domínguez, asesinado el pasado 20 de abril junto a su padre y su hermano, contaba con 2 mecanismos de protección a cargo de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, que no cumplieron con su función.

Así lo reconoció el Fiscal General del Estado, Federico Garza Herrera, quien indicó que el asesinato se está investigando por campo, de manera científica y con testimonios: “la científica ha arrojado algunos hallazgos y elementos que permitirán el esclarecimiento de los hechos. La indagatoria de campo arrojó ciertas declaraciones de testigos que permitirán alcanzar un resultado pronto y positivo”.

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Además, Garza Herrero señaló que al momento del ataque había una orden de protección que “se remitió directamente a la Secretaría de Seguridad del Estado, y hasta donde sé, él tenía un botón de pánico, ya que no quería protección física de elementos”.

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Respeto a la versión de que el triple homicidio fuere cometido por un comando armado, lo descartó pues “la evidencia que tenemos es totalmente diferente, un arma calibre 40 es la única que se encontró en la escena, pero tenemos que esperar a los resultados de la investigación pericial”.

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Medios locales reportaron que la mañana del pasado domingo, familia y amigos dieron el último adiós al muralista Héctor Armando, así como a su padre Aureliano Domínguez y a su hermano Julio Emmanuel.

Compañeros de Héctor de Fénix Art, pintaron de colores una gran manta con manos que uno a uno fue colocando, en demanda de paz y justicia, y como un recordatorio del lema del grupo de artistas: más amor y color.

Con información de El Pulso