México.- Tras perder de forma estrepitosa ante la coalición Juntos Haremos Historia, el PRI en Sinaloa debe pasar por un periodo de análisis profundo y autocrítica.

Su presidente estatal, Carlos Gandarilla, reconoció que el partido fue el gran perdedor de los comicios, pues se esperaba “carro completo” en diputaciones y alcaldías y se perdieron casi todos los escaños federales y locales y se cedieron la mitad de los municipios.

Gandadilla acusó que el partido debe pasar por un periodo de reflexión, para poder recuperar la fuerza que obtuvo en 2016, cuando Quirino Ordaz resultó electo Gobernador y el estado fue recuperado

El PRI pasó a ser la segunda fuerza, muy por debajo de Morena y empatado con el PAN, partido que ha sufrido un rechazo significativo por parte de los electores sinaloenses desde los comicios de 2015.