México.- El Grupo de Acción por los Derechos Humanos y la Justicia Social demandó liberar a Dafne McPherson Veloz, quien fue sentenciada a 16 años en prisión por haber tenido un parto fortuito al interior de los sanitarios de una tienda departamental donde laboraba.

Por medio de una acción en la plataforma Change.org, la agrupación recolecta firmas para respaldar un amparo con el fin de reabrir el caso, pues consideran que el proceso fue injusto e irregular debido a que fue víctima de violencia obstétrica, pues los médicos no diagnosticaron su embarazo; existió negligencia médica en la atención del parto y obstrucción por parte de Liverpool.

El parto fortuito ocurrió cuando Dafne regresó de su hora de comida y se incorporó a su área de trabajo, minutos después comenzó a sentir dolores muy fuertes en el vientre por lo que llamó de su extensión a la enfermera de Liverpool, pero no recibió respuesta alguna, enseguida se dirigió al baño y antes de poder sentarse sintió como se desangraba y caía algo de su cuerpo, al mirar se percató que era una bebé.

Inmediatamente Dafne tuvo mareos muy fuertes y perdió el conocimiento, cuando despertó se encontraba aterrada y sin saber el tiempo que había transcurrido desmayada, ya que al padecer hipotiroidismo y obesidad, nunca supo que estaba embarazada e incluso al acudir a los servicios médicos del propio Liverpool y del IMSS meses antes de parir, no le informaron su condición de embarazo.

En el piso de los baños de la tienda Dafne fue auxiliada por la enfermera adscrita al servicio médico de Liverpool y por otros paramédicos particulares, sin embargo dadas las condiciones en las que había parido y las condiciones de salud de su hija recién nacida ambas requerían de servicios especializados y atención inmediata de urgencia obstétrica.

A pesar de que la vida de Dafne y de su hija estaban en riesgo, el personal de Liverpool negó el acceso a los servicios especializados de salud y retardando el traslado de ambas a un hospital por casi 2 horas, pues Dafne tuvo el parto a las 17:30 horas y fue ingresada a un hospital hasta las 19:50 horas.

Desde que era trasladada al hospital, Dafne fue acompañada de una policía porque la responsabilizaban de la muerte de su hija que había nacido en condiciones muy complicadas en los baños de la tienda. Una vez en el hospital fue acusada por el Ministerio Público de la Procuraduría de Querétaro por el delito de “aborto”, pero al darse cuenta de la edad de gestación de su hija, le notificaron que podría irse del hospital por ese momento pero que la seguirían investigando por el delito de “homicidio”.

Casi 3 meses después, Dafne fue detenida por elementos de la policía, en cumplimiento de una orden de aprehensión solicitada por el Ministerio Público por el delito de “homicidio calificado” en contra de su propia hija recién nacida, en la acusación en su contra la fiscalía la acusó de no haber actuado “con su instinto de madre” y de tener una conducta “peor que una perra”.