México.- Las investigaciones realizadas revelaron que el sacerdote Joaquín Hernández Sifuentes, cuyo cuerpo fue encontrado enterrado en un predio de Parras de la Fuente, luego de su reporte como desaparecido, murió por estrangulamiento.

El cuerpo estaba en estado de descomposición y presentaba golpes en diversas partes.

Se presume que pudo haber fallecido desde el 3 de enero, mismo día en que testigos reportaron que 2 personas se llevaron el vehículo de Hernández Sifuentes, que fue localizado en Santa Catarina, Nuevo León.

El episcopado mexicano lamentó el asesinato del presbítero, y las investigaciones continuan para dar con los responsables.

Con información de Vanguardia