El informe de toxicología reveló la existencia de cocaína y otras drogas en la sangre de Carrie Fisher cuando murió en diciembre de 2016. 

El escrito señala que la estrella de Star Wars pudo consumir cocaína tres días antes de sentirse mal durante un vuelo de Londres que tuvo que aterrizar de emergencia en Los Ángeles para hospitalizarla. 

Además de cocaína, se encontraron rastros de éxtasis, restos de metadona y otros fármacos, aunque no se determina el impacto que éstas tuvieron en su muerte. 

Vía AP