Una joven lesbiana fue encontrada muerta luego de estar 7 años en terapias de conversión. Alana Chen nunca puedo expresar su homosexualidad por miedo y por qué en el ambiente en el que creció es conservador y religioso, por ello se sospecha que se suicidó.

Tras su muerte, su familia ha acusado a los líderes de la iglesia católica en Colorado, quienes fueron los que durante años practicaron en ella diferentes terapias de conversión, las cuales la llevaron a autolesionarse.

A la edad de 14 años la joven estadounidense descubrió que le gustaban las mujeres, sin embargo esta situación le causo un conflicto interno ya que ella buscaba convertirse en monja. Debido a sus creencias, a la primera persona que le confesó lo que sucedía fue al sacerdote de su iglesia.

El religioso le pidió a la joven no comentar nada sobre lo que pasaba ya que el “la arreglaría”, iniciando de esta manera su primera terapia de conversión.

Cuando llegó a la Universidad, Alana siguió buscando ayuda para “llevar una vida normal”. Durante esta etapa entró a la asociación caritativa Sacred Heart Counseling donde continuaron las terapias de conversión. Sin embargo, ella continuaba con sentimientos amorosos hacia otras mujeres.

“Sentía mucha pena y ansiedad. No podía dormir ni dejar de pensar en eso. Me preguntaba si me iría al infierno. Aun así, seguí teniendo fe y pensaba que las terapias y la iglesia me podían salvar”

Alana Chen

El odio hacia ella misma la hicieron suicidarse

Al ver qué no se podía “curar” y la repulsión que sentía al “ser lesbiana”, la joven empezó a autolesionarse causando gran daño en todo su cuerpo. Cuando tenía 21 años, su familia se dio cuenta de las lesiones y decidió internarla en un hospital psiquiátrico.

Luego de pasar unos días en este lugar, Alana Chen se dió cuenta que era más importante vivir bien que seguir con las normas de una sociedad que le marcaba lo que era correcto.

Después de salir del hospital, la joven de 24 años concedió una entrevista a Denver Post en donde habló sobre el calvario que vivió en las terapias de conversión, y cómo sufría de torturas para tratar de “curarla”.

Alana y su relación con la religión

En la entrevista realizada en agosto del 2019, la joven señaló que las terapias le habían generado grandes problemas emocionales, sobre todo porque había crecido en una comunidad muy religiosa en donde “ser gay” es algo malo, sin embargo después de todo el dolor que había pasado, sentía que Dios la había defraudado.

“Creo que fueron los consejos de la iglesia lo que me llevó a ser hospitalizada. Ahora he perdido mi fe. No sé qué creo sobre Dios, pero creo que si hay uno no necesita que siga hablando con él”

Alana Chen

A pesar de que sabía que las terapias de conversión no funcionaban y qué empezaba a ver la vida con otros ojos, Alana Chen nunca fue capaz de sentirse cómoda con su orientación sexual.

Luego de pasar dos días desaparecida, el pasado 9 de diciembre la policía encontró su cuerpo en el parque ecológico Chautuauca, en la ciudad estadounidense de Denver. Las primeras investigaciones señalan que la joven se suicidó.

Familia acusa a la iglesia católica del suicidio de Alana

Tras darse a conocer la noticia de su fallecimiento, la familia señaló que los líderes de la iglesia católica en Colorado jugaron un papel fundamental en su deceso por haberle practicado diversas terapias de conversión durante 7 años.

Un portavoz de la Arquidiócesis de Denver ha negado que se practique terapias de conversión.