Cruz Azul desperdició una pena máxima que hubiera significado el empate en el marcador global ante Rayados y tomar ventaja rumbo a la gran final del Apertura 2018. 

Después de media hora sin prácticamente jugadas claras de gol de ningún equipo, al minuto 34 se generó polémica luego de un ligero pisotón de Nicolás Sánchez sobre Roberto Alvarado, el cual fue marcado como pena máxima. 

El encargado de cobrar desde los once pasos fue Milton Caraglio, quien lo hizo de mala forma y terminó mandando su disparo por fuera de los tres postes defendidos por Marcelo Barovero. 

Ahora Cruz Azul tendrá que reponerse del golpe anímico que representa fallar un penal cuando todavía se encuentran en desventaja en el marcador global y a 45 minutos de quedar eliminados del torneo.