La nueva generación de cárteles en México obligó al gobierno de la República a modificar su predominante estrategia de "abrazos no balazos", que a través de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana bajó a los estados y municipios desde el 1 de diciembre de 2018.

Lamentablemente la difusión de algunos videos a través de las redes sociales, donde los grupos delincuenciales exhiben a sus comandos de élite e imponente artillería, lanzan llamados directos e incluso hasta amenazan al mismo gobierno. Esto llama aún más la atención del pueblo bueno y sabio, que los muchos o pocos resultados de los tres niveles de gobierno contra la delincuencia organizada.

En ese mismo sentido, la Secretaría de Seguridad Pública de Tamaulipas respondió a los violentos sacando a la calle a su nueva generación de policías. Personajes “sin identidad”, gustosos del reguetón fiero, alejados, por cierto, del ritmo que tocan los de cinturón piteado y botas; todo aquel de sombrero no es bien visto por esos reguetoneros fieros, que se ponen como leones cuando se topan con una pantera en el mundo salvaje de las balas, topones y explosiones.

A estos “fieros“ uniformados, dispuestos a jugársela, tanto en Matamoros como en la isla de concreto, me refiero a Nuevo Laredo, también les gusta eso del reguetón lento, sabroso y suculento movimiento como el fruto de la industria citrícola del agricultor tamaulipeco.

Un tanto deschavetados y capacitados por Estados Unidos, en México se les identificó con el acrónimo de GOPES (Grupo de Operaciones Especiales), una célula de élite adscrita directamente de la SSP, integrada por 150 elementos capacitados para cumplir con misiones que requieren de alto nivel de especialización y profesionalización, con bases operativas en los municipios de Reynosa y Ciudad Victoria.

El centro y norte de Tamaulipas es el ardor del infierno, donde los violentos desafían la fuerza del Estado, mismos que serán perseguidos por drones y helicópteros capaces de volar durante el día y la noche con cámaras térmicas a bordo; hasta el cansancio serán olfateados por binomios caninos y el mismo tráfico de sus drogas, armas, papel moneda y explosivos, pero también los GOPES fueron premiados con más de 25 bestias blindadas, y se presume tienen una identidad diferente y superior a la del resto de los policías del estado.

Francisco Javier García Cabeza de Vaca, gobernador de Tamaulipas, insiste en no dar tregua a los que alteren el orden, y presume que gracias a la buena relación en materia de seguridad con marinos y soldados como con la Guardia Nacional, los delitos del fuero común y asuntos del orden federal han disminuido en su entidad.

“A los delincuentes les decimos que en Tamaulipas violar la ley y atentar contra la paz de nuestro estado, poniendo en riesgo la seguridad de nuestra gente, tendrá una respuesta inmediata y enérgica del estado”, les advirtió el que dicen se hizo gobernador.

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