En una de las entidades más peligrosas para ser mujer y para ejercer el periodismo, la noche del pasado miércoles, Tiburcio Cadena difundió amenazas de muerte y ofensas sexuales contra la colega periodista Dana Lecuona, desde cuentas oficiales y falsas.

En un grupo de reporteros que cubre la información de prensa del Congreso del Estado, así como en su cuenta personal de Facebook, acusó a la reportera de sostener una relación íntima con un diputado federal, diciéndole “prostituta” y usando otras palabras altisonantes.

En las mismas cuentas vinculadas con su agresor, dijeron también que podrían quitarle la vida.

Dana Lecuona ha denunciado una persecución sistemática en su contra que está totalmente relacionada con sus trabajos como periodista, ya que tiene varios reportajes críticos acerca del presidente municipal de San Luis Potosí, Xavier Nava Palacios. Quien por cierto, es el jefe del agresor de Dana. Esta violencia digital y machista es gravísima y es cínico que la violencia venga de funcionarios públicos, de esos que se supone tendrían que trabajar por el bienestar ciudadano. San Luis Potosí tiene activada la alerta de género por el alto índice de feminicidios en la entidad y el presidente municipal permite que su equipo amenace de muerte y use violencia machista en contra Dana Lecuona. El informe especial sobre el estado que guarda la Alerta de Violencia de Género contra las Mujeres, la cual fue decretada para seis municipios desde 2017, señala que, de 2014 a 2017 se han registrado 163 muertes violentas de mujeres con características de feminicidios, siendo 2017 el año más peligroso para las mujeres potosinas, registrando el 40% de los casos en el periodo de tiempo estimado.

Aunque la periodista Dana Lecuona, del portal OneClick ya interpuso una querella ante la Fiscalía General de San Luis Potosí, así como una queja ante la Comisión de Derechos Humanos de ese estado para denunciar la difamación, el hostigamiento y la violencia de los que está siendo víctima, diversas organizaciones de la sociedad civil como artículo 19, frente nacional para la Sororidad y CIMAC ya están apoyando a Dana y lo tenemos que decir : no nos vamos a callar porque si tocan a una, nos tocan a todas. En un país donde matan 9 mujeres al día, estas amenazas y esta violencia no puede pasar desapercibida. Si algo le sucede a Dana Lecuona, tienen que saber que las autoridades de San Luis Potosí son las responsables y no, no queremos que haya ni una comunicadora más agredida ni asesinada, y mucho menos queremos más funcionarios machistas que se creen con el derecho de amenazar y humillar sólo por tener un cargo. ¡Ya basta de violencia machista contra periodistas!