Hace unos días el presidente López Obrador anunció el nombramiento de Tatiana Clouthier Carrillo como la próxima secretaria de Economía del gobierno federal. Para ello, la diputada deberá solicitar licencia para ausentarse de su curul en la Cámara de la Diputados, y lo hará, según informó la aún legisladora, una vez que Graciela Márquez haya sido formalmente designada integrante de la Junta de Gobierno del INEGI. De acuerdo a la normativa vigente, el presidente de la República deberá presentar la candidatura de Márquez al Senado de la República, para que sea la cámara alta quien haga la confirmación formal de la designación.

El nombramiento de Clouthier ha suscitado algunos cuestionamientos en la prensa y en las redes sociales. Se le ha criticado por ser egresada de la licenciatura en letras inglesas, disciplina perteneciente a un área del conocimiento ajeno a la secretaria del ramo que le ha sido asignada. En este sentido, yo señalaría que la formación inicial de un funcionario no debe ser, en ningún caso, motivo para descalificaciones previas.

Las responsabilidades de Clouthier serán variadas y complejas. Como bien expresa Javier Treviño Cantú (destacado ex subsecretario de Educación Básica de SEP) en su columna del día de ayer en este espacio de SDP Noticias, la secretaria deberá hacer de México un polo de atracción para la inversión extranjera directa, con el objetivo de crear empleos y de dar contenido a la implementación del T-MEC, en el contexto internacional de la pandemia y de una nueva administración en Washington. Adicionalmente, deberá ser capaz de sortear los obstáculos bilaterales provocados por las diferencias entre ambos gobiernos, principalmente, en materia laboral y de protección medio ambiental.

Tatiana Clouthier es un destacado personaje de la cuarta transformación. Como coordinadora de campaña de AMLO en 2018, la hija de Maquío logró posicionarse como un rostro público de referencia frente a los embates de Aurelio Nuño y Damián Zepeda, coordinadores de campaña de Meade y Anaya, respectivamente. Cada semana, en los programas televisivo mañaneros, Clouthier defendía vehementemente las propuestas de López Obrador, mismo ante algún señalamiento inoportuno de Zepeda de haber traicionado los ideales de su padre, frente a la rehabilitación lopezobradorista de la polémica figura de Manuel Bartlett. Por lo visto, la lealtad de Clouthier ha sido premiada, y ahora encabezará una importante secretaría de Estado.

Finalmente, no obstante las destacadas responsabilidades de la Secretaría de Economía dentro de la administración pública federal, se antoja sobremanera aventurado vaticinar que Clouthier podría ganar espacios políticos que le habilitasen para disputar la candidatura de Morena en 2024, principalmente ante la presencia del delfín Marcelo Ebrard (con todo y el apellido francés) y de otros titanes como Claudia Sheinbaum. Al tiempo.