Sin considerar las consecuencias que traerá para México carecer de una estrategia económica para hacer frente a los efectos del coronavirus COVID-19, agravada por las decisiones políticas de permitir consultas a mano alzada para cerrar el paso a inversiones en favor de la producción y el empleo, no hay duda de que el costo será muy elevado porque las relaciones mundiales serán diferentes.

Consideremos que en el siglo XX ocurrieron al menos tres pandemias: la de 1918, en la que la Gripe española acabó con un tercio de la población mundial; la de 1957 conocida como la Gripe asiática que devastó a unos 5 millones de personas y la de Hong Kong en 1968 que provocó el deceso de entre 2 a 3 millones de personas.

Por alguna razón, las organizaciones sanitarias internacionales no consideran al VIH como pandemia, aunque en 1980 cobró la vida de unas 770 personas en el mundo.

Ya en el siglo XXI se presentó la primera pandemia en 2003, que conocimos como el síndrome respiratorio agudo y grave (SARS) que afectó a más de 20 países en Norte y Suramérica, además de Europa.

Para 2009 sobrevino la crisis de la influenza N1N1 que se propagó desde el sur de Estados Unidos y México. Le quitó la vida a un millón de personas solamente en Estados Unidos, según reporte de los CDC (Centros de Control de Enfermedades Infecciosas, por sus siglas en ingles) y que explica muchas decisiones electorales del presidente Trump.

El impacto en la economía mundial por efecto del virus del SARS significó una contracción del PIB mundial en un 0,1% durante 2003. A su vez, el H1N1, en el año 2009 reconocido como pandemia tuvo un costo estimado en 50 mil millones de dólares en materia solamente sanitaria pero las pérdidas económicas fueron del orden de 1,.5 por ciento del PIB para todo el mundo, tan solo para México representó 1 por ciento del PIB, según datos del Banco Mundial.

Para lo que viene en el mundo, y si tomamos en consideración que en China inició la actual pandemia del coronavirus y que es el mayor exportador del mundo, con ventas cercanas a los 2 mil 200 trillones de dólares durante 2019, se estima que las consecuencias económicas globales derivadas de la emergencia sanitaria no podrían ser inferiores de 3 por ciento en 2020, la mitad solamente por la suspensión de actividades de China.

Aunque eso no es todo, el virus modificará las condiciones económicas internacionales y afectará los mercados laboral, financiero y comercial.

Según el Observatorio de Complejidad Económica, de la consultora Oxford Economics, por sectores se afectará globalmente a la Industria textil, por el cierre de las fábricas, en ciudad china de Suzhóu, en donde se produce el 80 de los vestidos de novias que se venden en todo el mundo, incluidos los de La Lagunilla, en la Ciudad de México.

También la industria tecnológica, pues se dejó de producir el 50 por ciento de teléfonos inteligentes.

En cuanto al turismo China es el mayor proveedor de paseantes en el mundo. Sólo en 2018 hicieron casi 150 millones de viajes, México incluido. Países como Myanmar, Tailandia, Camboya y Vietnam los chinos son la quinta parte de sus turistas.

Transporte aéreo, la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) informó en febrero que las aerolíneas de todo el mundo perderán más de 30 mil millones de dólares este año por el coronavirus.

La industria farmacéutica sufrirá una pérdida espectacular porque China es su principal proveedor de materias primas y por lo que se refiere a los sectores industrial y de manufactura el efecto será muy grave debido a que la suspensión de actividades afectará a las empresas maquiladoras, especialmente mexicanas, así como al sector automotor internacional, si se considera que Italia paró su producción totalmente.

Aunque la economía mexicana no depende tanto de China como de Estados Unidos, especialmente las empresas maquiladoras instaladas en el norte del país resentirán los efectos del coronavirus, con graves efectos en materia social.

El panorama mundial será muy diferente a partir de julio de 2020. Más cuando se carece de una estrategia económica sostenible para lo que viene a partir de esa fecha y que golpeará a todos los estratos, incluida La Lagunilla.

@lusacevedop