Una breve reflexión en el tema del polémico caso del empresario papelero Miguel Rincón, compadre del presidente y dueño de empresa papelera de excelencia, quien ganó la licitación para surtir el papel con el que se elaborarán los libros de texto de la SEP, y que provocó el acusar al gobierno de tráfico de influencias por dicha selección. Porque AMLO no sólo practica la justicia, sino que es hombre comprobadamente justo, opino que lo que debe hacer el presidente a la brevedad posible es discutir en conferencia de prensa todos los detalles de dicha licitación incluidos números exactos y nombres de las empresas que contendieron. Cuando esta información arroje que la empresa ganadora representó para el gobierno un considerable porcentaje de ahorro conforme a la oferta de las demás, el presidente se habría adelantado en la conferencia de hoy, al asegurar que por polémica mediática generada al respecto-- detonada por el periódico Reforma—de haber sido su compadre el ganador, vería la manera de cancelar, si fuese factible legalmente, dicha nominación industrial para dicho empresario, que supongo no ha sido aún contratada de facto. Pero tomando como base el bajo costo de la oferta del señor Rincón, la justicia acompañaría al cien por ciento el ejercicio de licitación a su favor.

Esto debería pesar más, que el reciente compadrazgo del presidente con un gran emprendedor comprometido de años con su liderazgo para sumarse a su movimiento transformador y enderezar el rumbo nacional.  Lo que debió de haber plasmado el presidente durante su conferencia mañanera de hoy, reitero, ya que se tocaría inevitablemente el tema, es la pantalla explicativa frente a los reporteros y pueblo en general, mostrando el desglose comparativo de contendientes y presupuestos recibidos en dicha licitación, razón por la cual el industrial papelero Miguel Rincón ganó. Y ahí dejar el debate, en los números, que seguramente abonarán para suavizar tanta denostación indebida, tanta acusación sin sustento que insisten en mantener los detractores de la 4T, sin dejar de emitir ácida crítica contra toda acción que tome o no tome nuestro presidente. Pero lo que no debe permitir nuestro presidente, es dejarse intimidar por las veladas manipulaciones de sus adversarios, que en efecto lo que desean, es verlo flaquear o caer, para luego hacer lumbre del árbol caído. Que no se deje impresionar AMLO y se decida, en este caso u otro, el actuar con proactiva absoluta justicia para beneficio de mayorías, como lo es el ahorro en el presupuesto para comprar papel más barato y de buena calidad, con el que se elaborarán los libros de texto.