La trama de El Alacrán Blanco, la más reciente novela de autoría del suscrito, sobre las actuaciones clandestinas de la CIA, comienza en una fiesta de cumpleaños de un niño de secundaria en la Isla de Margarita en Venezuela, a la que asisten entre otros invitados, además del protagonista claro está, Richard. Kern Lorden y Luis Posada Carriles.

Fiesta de cumpleaños que daba a su hijo un integrante del SIM ( sistema de inteligencia militar del régimen político imperante en el lugar antes del arribo de Hugo Chávez al poder).

Simón, el orgulloso padre invita a su mansión en las afueras de Porlamar a sus más cercanos amigos, para celebrar el onomástico de su hijo Carlos, no en balde, se llamaba igual que el hijo de Félix Lope de Vega y Carpio, el “fénix dellos ingenios” y quien falleciera en las aguas circundantes de la isla cuando naufragó la embarcación en la que había decidido cazar fortuna en la pesca de las perlas.

Fiesta infantil que se habría llevado al cabo en el señero año de 1976 con motivo de las fiestas de “Nuestra Señora del Pilar”, dado que el hijo celebrara su cumpleaños en concordancia con las fiestas patronales de su madre, y, precisamente por las fechas en que la opinión pública de todo el continente se conmovería hasta la saciedad por el atentado con explosión que cobrara la vida la tripulación de una aeronave de Cubana de Aviación que había despegado poco antes del aeropuerto internacional de Maiquetía.

Al paso de muchas décadas, el protagonista, un niño entonces, compañero de andanzas infantiles del celebrado Carlos, se encontraría en México con los mismos personajes, Richard Kern Lorden sería designado asesor honorario del gobierno de Puebla en su relación con los migrantes en los Estados Unidos, en tanto que Luis Posada Carriles huyendo de las acusaciones penales que por terrorismo afrontaría prácticamente ante la justicia de todos los países del área.

Los pasajes más recónditos en la menoría del protagonista aflorarían contemplando los “Murales de la Casa del Dean” Tomás de la Plaza cuyos trazos misteriosos, por lo demás, terminarían por revelarse asimismo secretos demoledores para la seguridad continental.

NOVELAS POLICÍACAS, titulo en el que se contiene el relato de referencia se encuentra ya a la venta  en la librería “Profética casa de la lectura” y esperamos que resulte una lectura grata y de interés en estos momentos en que la situación que atraviesa Venezuela y el papel que en la mismo habrá de jugar nuestro país, ha devenido en obligado tópico de conversación de salones y cafés.

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