En este mundo hay figuras de todo tipo de ideología, hombres y mujeres que buscan identificarse con alguna corriente, una de ellas es la populista, una filosofía o sistema que ha sido bien aceptada y que ha cambiado a muchos países.

 El conflicto del populismo es cuando esta surge en la falsedad y el oportunismo infestando las corrientes a través del uso de las redes sociales, ese es el modus operandi de Carlos Mimenza Novelo.

 Si bien las redes sociales están cambiando la democracia y los ciudadanos se involucran en la toma decisiones a través de ellas, no es válido que un oportunista como el empresario y millonario Carlos Mimenza quiera viciar el contexto.

 Carlos Mimenza en definitiva se está equivocando de país al querer demandar a todos y por todo a quienes están inmersos en la política quintanarroense, no será extraño cuando quiera hacerlo con empresas, pequeños comercios, al papa, al Osito Bimbo, a Dios, eso puede aplicar en el vecino país del norte.

 Todos pensaríamos que en la Procuraduría General de la República prácticamente ya saben si le gusta el café cargado o con dos de azúcar a Carlos Mimenza y si a este le van a dar calendario a fin de año por tanta visita, lo cierto es que a la fecha no se ha visto como tal alguna demanda interpuesta; no por el hecho de grabar dos minutos y parlotear afuera de una instalación de justicia significa que se procedió.

 Lo destacable es que hasta el momento de sus cientos de demandas, no hemos visto proceda ninguna, o que alguna autoridad de la PGR pronuncie el agradecimiento al empresario por su contribución a la justicia, autoridades internacionales agilicen procedimientos por la “lucha que ha emprendido” o el mandatario estadounidense Donald Trump sienta empatía por Carlos Mimenza.

 Carlos Mimenza es como aquel joven desfavorecido que se da valor a través de las redes sociales para decir que es guapo y carismático y no es más que un desafortunado puberto lleno de complejos y acné. Carlos Mimenza equivocó el rumbo de lo que en su momento quiso encaminar, ser un ciudadano participativo y que terminó en un falso populista.

 Un hombre auto designado como -justiciero del pueblo- que cae en las incongruencias que exponen la falsedad de sus discursos, es sencillo; critica el uso y reparto de despensas y posteriormente dice que lo que gasta el gobierno en publicidad alcanzaría para repartir cientos de ellas, critica al gremio periodístico pero se cuelga de sus notas.

Carlos Mimenza Novelo quiere tomar el poder para imponer su voluntad, eso lo hace un populista mentiroso porque una cosa es tener una postura honesta y otra es ser oportunista, queriendo educar al pueblo a través de videos hablando y hablando cuando lo que conduce es hacer  sentir a quienes lo escuchan miserables.

Sus pronunciamientos muestran al rico haciendo sentir más jodido al pobre, utilizando el “populismo” que se ha creado como demagogia vulgar, solo hay que rascarle un poco a la historia y hay muchos -Mimenza- que han hundido igual o peor a sus pueblos.

Ya lo dijo un populista real como el ex Presidente de Estados Unidos Barack Obama “Tengan cuidado en darle el título de populista a cualquiera, a quien esté emergiendo en un momento de ansiedad política, sin preguntarnos si realmente esta persona ha combatido por los más pobres, o se ha puesto a su lado de los trabajadores, y ha luchado por ellos o solamente es una pose oportunista”.

¿Les sonó familiar? No hay mejor descripción para Carlos Mimenza, el fanfarronear no significa dar garantía de intención por el bienestar común.

 Carlos Mimenza cree que usando camisetas de ropa interior oscuras, no utilizando relojes ostentosos lo hace más sencillo o más cercano a la gente, de ser así no conduciría un auto deportivo de lujo, o andaría en jet privado.

Para Carlos Mimenza si algún ciudadano o funcionario público aunque sea de rango menor tiene el gusto por viajar o endrogarse en comprar artículos de lujo, este en automático ya es un ratero, corrupto, seguramente las riquezas del empresario las obtuvo porque él encontró el tesoro de Moctezuma y los cientos de hectáreas que son de su propiedad las adquirió porque llegó primero a ocuparlas.

Carlos Mimenza considera que su lenguaje miserable y arrabalero de verdad instruyen a la sociedad habida de igualdad, lo que hace es empobrecer a un Estado, induce a generaciones a que dejen las aulas y la educación que es lo que de verdad necesita el país y Quintana Roo.

“Ante la ignorancia de falsos populistas, la educación es el camino hacia la paz.” Dijera Jorge Olvera García, Rector de la UAEM.

 EN EL OJO DE HURACAN

La libertad de expresión es un derecho fundamental de la democracia y para quienes ejercemos el periodismo es una práctica de vida de la cual se está consciente de los pros y contras que conlleva pero también de las leyes que nos rigen y protegen.

 A quienes tenemos como profesión u oficio el periodismo sabemos que una ley estatal nunca estará por encima de Leyes Federales y mucho menos de la Constitución, es por ello que no debería haber mayores aspavientos por la creación y anulación de una Ley para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas de Quintana Roo.

Sin embargo esta ley ya existe aunque con lagunas y deficiencias que más que ser erogadas deben ser reformadas para real beneficio de los comunicadores. Sin embargo como anteriormente mencioné existen otras legalidades de protección que en cualquier nivel de gobierno se debe garantizar sean aplicadas en beneficio de los medios de comunicación y los comunicadores y comunicadoras.

Y las autoridades que no actúen conforme a derecho se convierten en cómplices de los agravios, situación que se torna compleja cuando un comité derivado de esta ley está en manos de quienes pudieran ser los que se sientan ofendidos o agraviados, es decir el gobierno en turno.

 Esta opinión y muchas otras de quienes nos dedicamos al periodismo en Quintana Roo son las que deben ser escuchadas, analizadas y sustentadas antes de tomar la iniciativa de echarla abajo.

No se confundan a quienes tienen ese puño de tierra en la mano, no es que queramos retroceder o avanzar sobre dicha ley y la conformación del Consejo, es el hecho de que quienes se han pronunciado por rencores a un apellido y sueñan con ver cristalizadas sus aspiraciones burocráticas, no han sido elegidos por la mayoría del gremio de comunicación y mucho menos nos sentimos representados.

 El gremio periodístico tiene una tarea diaria y no es ser la nota, no pretendan distraernos del objetivo, ni manipular estos hechos en beneficio de un grupo.

 LO QUE LAS COPETUDAS CUENTAN

¡Por fin se fue! Así vitorearon en las oficinas de la Delegación de la Secretaría de Desarrollo Social de Quintana Roo ante la muy tardía renuncia de Marybel Villegas Canche, de quien hace meses se esperaba le dieran las gracias ante la serie de actos desafortunados que venía realizando en la dependencia federal.

 Ahora tras su renuncia, Marybel Villegas pretende tener más títulos que la difunta Duquesa de Alba toda vez que todo indica que se unirá a las filas del Movimiento de Regeneración Nacional MORENA en busca del cobijo de Andrés Manuel López Obrador y poder participar en la futura contienda electoral federal.

Importante será la labor que hagan las autoridades electorales ante los diversos actos anticipados de campaña que le fueron señalados a la multipartidista Marybel Villegas mientras estaba en funciones,  así como el mal uso de recursos públicos federales en beneficio de sus aspiraciones políticas, COMO DIJERA LA TIA JOVITA: Hay personas que uno no las entiende aunque vengan con subtítulos.