Un neozelandés de 22 años acusó a un programa de reconocimiento facial de registrar sus ojos como si estuvieran cerrados, esto al ingresar su fotografía para renovar un pasaporte.

Richard Lee, con ascendencia asiática publicó el incidente en Facebook, que forma parte del 20 por ciento de las fotografías que son rechazadas por el sistema, según afirmó un representante del Departamento de Asuntos Interno de Nueva Zelanda.

Aunque muchas personas afirman que la tecnología no es propensa al racismo, los sistemas de reconocimiento facial aún no pueden funcionar correctamente sin hacer sesgos al comparar características raciales diferentes al estándar con el que fueron programados.

Casos como este se han repetido en aplicaciones como Google Photos, que solía identificar personas de raza negra como gorilas; o el sistema de rastreo facial de HP que sólo funcionaba con personas de piel clara.

Con información de DailyDot.