De acuerdo al sitio DigiTimes, los dos próximos iPhones que lanzaría Apple podrían ser presentados en eventos separados.

¿Las razones? Además de las especulaciones sobre los problemas y retrasos en la manufactura de los equipos, Apple tomaría esa decisión para evitar que los dos equipos, que tendrían pantallas de 4.7 y 5.5 pulgadas, compitieran entre ellos.

Como ejemplo, se cita lo que pasó entre el iPhone 5S y el 5C el año pasado, cuando el segundo equipo quedó a la sombra del primero, afectando sus ventas.

La diferencia sería que entre el 5S y el 5C había un claro ganador y una diferencia de precio no muy amplia, mientras que entre los nuevos modelos sí habría una clara distinción al menos en el tamaño de sus pantallas, por lo que tal vez no perjudicaría el que ambos equipos se presentaran juntos.

¿Les gustaría que los dos futuros iPhones fueran presentados juntos o en eventos separados?

Con información de Ubergizmo