Un hombre residente de Texas, Estados Unidos, enfrenta una investigación por parte de las autoridades de Cleveland, por haber arrastrado del cabello a su hija en un supermercado.

Erika Burch, testigo del desagradable incidente, fue quien llamó a la policía luego de intentar detener al varón, sin ningún éxito: "Me dijo que no me metiera en sus asuntos".

Cuando los agentes llegaron le dijeron que no podían hacer nada, pues la pequeña no presentaba lesiones visibles. Entonces, la chica tomó una foto y la compartió en sus redes sociales.

De esta forma, se abrió una averiguación contra el hombre, pero no se han presentado cargos oficiales debido a que se justificó argumentando que esa era su forma de aleccionarla.