Imagínense lo que debe ser despertar en la madrugada por el llanto de tu bebé y ver que entre tus sábanas está enredada una serpiente... Pavor mil.

Pues eso ocurrió en realidad, una víbora de casi un metro estaba en la cama de una pareja residente de Zaragoza, España, y no la notaron hasta entrada la noche.

Cuando se dieron cuenta, cargaron a su bebé y lo pusieron a salvo cerrando la puerta del cuarto. Inmediatamente llamaron al servicio autonómico de emergencias.

Claro, al final, valientes que atraparon a la serpiente fueron los bomberos, quienes les informaron que se trataba de una "culebra de escalera", no venenosa, de 80 centímetros.

Con información de ABC.