Jonathan Ray, de 23 años de edad, deseaba tanto “atascarse” con el pozole preparado por su madre que no aguantó más y decidió ingresar ilegalmente al hogar materno, en donde se hizo de una olla del platillo típico mexicano.

Previo a su crimen, el joven mandó un mensaje de texto a su mamá, en donde le señaló que “tenía hambre” e iba a entrar a su casa a comer, a lo que la señora respondió de manera negativa.

Al llegar a su hogar, la mujer se dio cuenta que la puerta estaba forzada y que la olla de pozole preparada para sus demás hijos había desaparecido.

La mujer reportó el robo de una olla “grande” del caldo y la policía arrestó al infractor con cargos de robo a casa habitación.

La mamá del detenido señaló que ya corrió a su hijo de la casa, por lo que no es bienvenido, además de señalar que necesita "ayuda".