Edgar Mitchell, astronauta retirado de la NASA y uno de los pocos hombres de caminar sobre la luna, señaló su creencia de que los alienígenas intervinieron para prevenir una guerra nuclear entre la Unión Soviética y Estados Unidos.

Mitchell, el sexto hombre en caminar sobre nuestro satélite natural, hizo estas sorprendentes declaraciones al cumplirse 70 años de la explosión de un artefacto atómico sobre Japón.

El astronauta señaló en entrevista: ?La base militar de White Sands era un centro de pruebas para las bombas atómicas. En eso estaban interesados los extraterrestres. Deseaban conocer nuestras capacidades de armamento?.

?En mi experiencia, hablando con gente (relacionada con este tema), me ha mostrado de manera clara que los extraterrestres habían estado intentando el evitar la guerra y buscaban ayudar el crear paz en la tierra?, concluyó el octogenario.