Dharmendra Pratap Singh, de la India, es considerado uno de los varones más altos del mundo debido a que mide 2.438 metros, tan sólo dos pulgadas menos que el récord mundial.

Residente de Meerut, en Uttar Pradesh, Dharmendra confiesa que la vida para él no es fácil, pues a sus 32 años está luchando por encontrar el amor:

Pese a que las mujeres se interesesan en él, el hombre comentó que no ha encontrado a la chica de sus sueños ni ha alguien que admire como para formalizar una relación.

La situación se complica aún más para Dharmendra, pues su altura le ha impedido encontrar un trabajo bien remunerado:

Al terminar sus estudios y no conseguir un empleo propio a su profesión (tiene una maestría en hindi), se vio forzado a aceptar un trabajo como "atracción" en un parque de diversiones, donde le pagan 30 peniques diarios por fotografirse con los visitantes. Sin embargo, algunos de ellos se van sin pagar, lo que ocasiona que Dharmendra no tenga su pago completo: 

"Algunas personas pagan, algunos huyen sin pagar. Me lastiman las personas que huyen sin pagarme".

Durante su adolescencia, el hombre sufrió bullying por parte de sus compañeros de escuela, quienes lo llamaban: "jirafa" o "camello". Pero los problemas no terminan allí; el hombre ha comenzado a tener dificultades para caminar.

Además, es muy raro que salga de casa, pues las personas lo acosan: "Tengo que hacer frente a una gran cantidad de dificultades que una persona normal no tiene por qué. Es una sensación terrible cuando no soy capaz de hacer cosas normales".

Y por si fuera poco, se fracturó la cadera y le pusieron una placa que le produce dolor cada que camina. 

No obstante, uno de sus vecinos afirma que Dharmendra  suele no hacer caso a los comentarios de la gente, y pese a los retos que enfrenta, siempre se muestra optimista: