Televisa me da asco. Desde que tengo uso de memoria no han hecho otra cosa que propagar mentiras en sus noticieros (antes con los Zabludovsky, ahora con López-Dóriga), vender basura denigrante como humor familiar (las porquerías de Ortiz de Pinedo y "Chespirito") y perpetuar los más nefastos estereotipos en sus telenovelas. Pero lo que hicieron el día de ayer, entrevistar a un Chava Cabañas a todas luces disminuido mental y físicamente , realmente es algo indescriptible, de tan bajo y ruin.
En la entrevista que la señora Karla Iberia Sánchez le hizo a Cabañas y que fue transmitida en el "noticiero" de López-Dóriga, pudimos ver al futbolista confuso, rígido, con algunos problemas de habla y un rostro inexpresivo. Es dolorosamente obvio que Salvador debería estar concentrándose en su recuperación y no en responder preguntas que parecían formuladas para un infante y no para un ex-jugador profesional de fútbol y un adulto.
¿Acaso doña Karla Iberia no tiene sentimientos? ¿No siente compasión? ¿Cree que es lo correcto exhibir así a una persona a todas luces convaleciente? ¿O se le olvidan todos sus escrúpulos cada que cobra su cheque?
Víctor Hernández comparte en su columna la teoría de que esta entrevista innecesaria y quizás improvisada se trata de un distractor del caso Peña Nieto. Y aunque no me consta, no encuentro ninguna otra explicación posible.
Pobre Salvador. A estas alturas lo mejor es que su familia se lo lleve de México, para que Televisa no vuelva a exhibirlo de esta manera tan vergonzosa y denigrante.
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