México.- El boquete financiero que dejó Rodrigo Medina al dejar la gubernatura de Nuevo León es mayor al que se contabilizó en la transición.

Y es que aunque en julio del año pasado se estimó que el déficit presupuestal sería de 6 mil 200 millones de pesos, terminó por ser más alto ya que terminó la Administración anterior dejó obras inconclusas.

Es decir que el boquete financiero en el estado es de 8 mil 500 millones de pesos durante 2015, una cifra 37 por ciento más alta, dijo Carlos Garza, Tesorero de Nuevo León.

De acuerdo con Reforma, Garza aseguró que si el actual Gobierno no hubiera aplicado un plan de contención en el gasto, el boquete habría sido más grande.

El gobierno que actualmente encabeza Jaime Rodríguez no la tiene fácil, pues además enfrenta la falta de flujo para liquidar cerca de mil 800 millones de pesos que se adeudan a diferentes proveedores desde la Administración pasada.

Garza dijo que para este año, anticipó, el déficit presupuestal bajará en mil 900 millones de pesos, en comparación con el ejercicio pasado, pero seguirá siendo alto.

Señaló que como parte de las estrategias de contención de gasto, se instruyó a las dependencias estatales para que no haya ampliaciones en los techos presupuestales y evitar así que suba el déficit hasta que mejoren las finanzas.

Subrayó que la meta del plan de contención y de ahorro es de 3 mil 600 millones de pesos, donde se contemplan ciertos "sacrificios" que podrían ser aliviados también con aportaciones federales.

"Sólo en inversión estamos sacrificando cerca de 770 millones de pesos", dijo.