México.- Miembros de distintas organizaciones sociales y del magisterio protestan en el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Chilpancingo, previo a que se le dicte Auto de Formal Prisión o de Libertad al líder comunitario Gonzalo Molina, preso hace más de dos años.

Desde las 10:00 de la mañana miembros de distintas organizaciones sociales, de la Policía Comunitaria y magisterio disidente, arribaron al acceso principal, colocaron pancartas y lonas y cerraron la puerta principal.

Las actividades al interior no se han suspendido, y están utilizando accesos alternos para no interrumpir las labores, pues al interior se encuentran los juzgados, primero, segundo, tercero y cuarto.

Un grupo de Policías Estatales con equipo antimotines se encuentran al interior y al exterior de las instalaciones, lo que tensa la situación, y ya han discutido en un par de ocasiones.

Exigen la libertad del líder de la Policía Comunitaria de la CRAC, Gonzalo Molina, quien se encuentra preso desde hace más de dos años, acusado por diversos delitos, del fueron común y federal.

El pasado cinco de abril, la cuarta Sala Penal ordenó la reposición del procedimiento a fin de que se pudieran presentar pruebas que se había omitido desahogar en el plazo constitucional.

Gonzalo Molina enfrenta cargos por los delitos de Terrorismo, Privación Ilegal de la Libertad, Robo Específico y Lesiones Agravadas, esto por los hechos el 27 de agosto de 2013, cuando la policía comunitaria a su cargo desarmó con violencia a los elementos de la Policía Municipal de Tixtla.

El abogado defensor, Hegel Mariano Ramírez, explicó que dicha resolución se logró gracias a una apelación, con la cual se repuso el proceso, se admitieron pruebas que se omitieron en el plazo constitucional, específicamente los careos con quienes lo acusan, y algunos testimonios que ofrecieron a su favor.

Hegel Mariano, consideró que la mayoría de los delitos que se le imputan a su defendido, obedecen a cuestiones políticas, porque las acciones que realizó Gonzalo Molina, fueron como autoridad de la Policía Comunitaria, por lo que la privación de la libertad y portación de armas no se configurarían como delitos.

La reposición del proceso penal, o por lo menos parcial de Gonzalo Molina, se relaciona recientemente con el caso de Nestora Salgado quien fue liberada al no acreditarse los delitos que se le imputaban y al reconocérsele como autoridad comunitaria de la CRAC de Olinalá, a lo que se aspira ocurran en este caso.