Tuxtla Gutiérrez, Chiapas.- Chiapas alberga más de 11 mil especies de plantas y animales, riqueza que lo posiciona como una de las entidades con mayor biodiversidad biológica de México y que, además, representan un reto de conservación.

Por ello, el gobierno de Manuel Velasco Coello suma aliados en las tareas de protección de especies naturales, con mayor énfasis en aquellas que requieren su acción inmediata, para lo cual es fundamental el apoyo de la Federación, así como la participación de la población.

En los últimos cuatro años se invirtieron 16.7 millones de pesos en acciones directas de investigación, conservación, protección y reproducción de fauna y flora desde su lugar de origen como en cautiverio, y se dio continuidad a programas enfocados en la reproducción de especies en alguna categoría de riesgo de extinción, como el jaguar, tapir, pavón, grisón y la tortuga blanca.

Como parte del programa federal de Recuperación y Reintroducción de Especies en Riesgo, se rescataron ejemplares de diferentes especies, mismos que recibieron atención en el Zoológico Miguel Álvarez del Toro y que se rehabilitan para ser devueltos a sus espacios naturales.

En este sentido, una de las historias de éxito más entrañable es la liberación de 12 monos araña en un área del Parque Nacional del Cañón del Sumidero, tras 50 años de no poblar su hábitat, y que gracias al esfuerzo y compromiso que mantiene el gobierno estatal logró ser reintroducida.

En estas tareas de rescate la participación activa de los comuneros es de suma importancia, y el gobierno chiapaneco reconoce su compromiso con los beneficios y apoyos del Programa Pago por Servicios Ambientales, y es que remunera las tareas de conservación efectuadas por 24 mil 883 ejidatarios, lo que permite la protección de casi 150 mil hectáreas.

El gobierno estatal informó que en cuatro años se inyectaron más de 578 millones de pesos a este esquema con el que se protege el hogar de cientos de especies de plantas y animales que habitan en uno de los pulmones del país, la Selva Lacandona.