México.- El asesinato del alcalde de San Juan Chamula, Chiapas, Domingo López González, el sábado pasado ha perturbado tanto a su familia que ya anunció que se retira de la política.

En este contexto, entregó este martes el bastón de mando, símbolo del poder, a las autoridades tradicionales de ese ayuntamiento, para que lo guarden y después lo dejen en manos del presidente municipal sucesor, que aún no ha sido nombrado.

“(La familia) se va a retirar por completo de la política. No queremos saber nada y no nos interesa quién será el próximo presidente. No queremos saber, porque nadie va a recuperar la vida de mi papá y no vamos a actuar. Ya no queremos que corra más sangre en el pueblo de San Juan Chamula”, expresó Luis López González, hijo de Domingo.

“Yo sé que ya se arrepintieron los que mataron a mi papá, pero que Dios los perdone también, que les brinde salud, que les dé vida, nosotros ya los perdonamos, porque mi papá ya no va a resucitar por más que peleemos. El ya murió y venimos a entregar el bastón de mando”, comentó.

En un ritual efectuado en la casa que el alcalde tenía en la cabecera municipal de Chamula, fue entregado el bastón Luis López y Salvador López González, único hermano del alcalde asesinado.

La ceremonia contó con la presencia de las autoridades tradicionales de los tres barrios: San Juan, San Pedro y San Sebastián.

“Vamos a entregar el bastón de mi difunto hermano en las manos del primer alcalde del barrio San Pedro, como es la costumbre y la tradición. No va a pasar a otro barrio, porque mi hermano era del barrio San Pedro. Ya después, si van a convocar a una reunión al presidente del partido (Verde Ecologista de México, al que pertenecía el edil) ellos sabrán qué van a hacer, porque nosotros no somos autoridades”, comentó Salvador.

“Lo que quiero es que escuche el gobernador (Manuel Velasco Coello), que haya justicia para los que lo hicieron; que las autoridades competentes manden a citar a los agentes y presidentes de los comités que según vinieron a pedir apoyo a mi hermano difunto, porque ellos saben quiénes llegaron a decir que no hay obras ni recibirían nada del presidente”, dijo.

López González era de origen humilde, conocido con el sobrenombre de tsetjol (“corta cabeza”), y comenzó a crecer económicamente en su comunidad Yitic, cuando inició la explotación de un banco de grava e instaló una pequeña fábrica de blocks para la construcción. 

Con información de La Jornada