Ciudadanos de Piedras Negras y Eagle Pass, en la frontera entre México y Estados Unidos, celebraron con mariachi la cancelación del muro propuesto por Donald Trump, pero exigieron al nuevo presidente Joe Biden medidas adicionales para enterrar el proyecto definitivamente.

De acuerdo con Zócalo, músicos de mariachi se colocaron de los dos lados del Río Bravo en la ‘serenata para parar el muro’ y tocaron varias canciones como muestra de unidad entre México y Estados Unidos.

Mientras sonaba el mariachi, decenas de ciudadanos de ambos reunidos en el lugar mostraron carteles con mensajes a favor de la migración y en contra del muro fronterizo que, advirtieron, no ha quedado completamente cancelado.

Ciudadanos de Piedras Negras y Eagle Pass advierten que el muro no está totalmente cancelado

El evento fue organizado por la organización Eagle Pass Border Coalition, y estuvieron presentes el alcaldes Luis Sifuentes, representando a la ciudad estadounidense, y Elías Díaz por parte del ayuntamiento de Piedras Negras.

Alejandro Flores, de la Eagle Pass Border Coalition, celebró que Joe Biden haya decidido frenar la construcción del muro fronterizo, pero subrayó que se debe mandar un mensaje muy claro desde la orilla del país, pues todavía hay contratos y permisos vigentes que dejan al proyecto en el limbo legal.

“No podemos tener un futuro si no somos parte de la conversación”, advirtió el activista México-estadounidense, quien resaltó que Eagle Pass y Piedras Negras tienen una relación de amistad y cooperación de más de un siglo.

Por su parte, Robie Flores pidió un minuto de silencio por el más de medio millón de personas que han muerto por la pandemia de coronavirus en ambos países, primero y tercero con más decesos por la enfermedad a nivel mundial.

El 20 de enero pasado, horas después de tomar protesta como presidente de Estados Unidos, Joe Biden firmó una orden ejecutiva para detener las obras del muro fronterizo con México iniciado por su predecesor Donald Trump.

Ese mismo día, firmó órdenes para restablecer programas de apoyo a migrantes y envió al Congreso de Estados Unidos una ambiciosa reforma migratoria que podría dar ciudadanía a unos 11 millones de mexicanos que viven en ese país sin un estatus regular.