Cuba.- El país defendió hoy su decisión de vetar la entrada a Luis Almagro, secretario general de la OEA.

De acuerdo con el país, la invitación a Almagro formaba parte de un plan para dañar sus relaciones internacionales, además de aseverar que no regresara a la Organización de Estados Americanos (OEA).

Cuba acotó que el viaje de Almagro formaba parte de una estrategia “abierta y grave” para provocar al gobierno de Raúl Castro con objeto de “generar inestabilidad interna, dañar la imagen internacional del país (…) y afectar la buena marcha de las relaciones diplomáticas”.

El país argumentó el sustento de la soberanía para impedir el acceso a Almagro y otros ciudadanos con vinculación a dichos hechos.

Con información de AFP