Estados Unidos.- La construcción de un oleoducto cercano a una reserva de tierras siux Dakota del Norte fue frenada este domingo por el Cuerpo de Ingenieros del Ejército, que decidió atender las protestas que por meses realizaron ciudadanos locales, activistas y hasta políticos, en defensa de la preservación de la zona para evitar posibles afectaciones al agua potable.

En un comunicado, el Cuerpo de Ingenieros consideró que se deben trabajar en otras posibles rutas para la obra de mil 886 kilómetros, que se encuentra construida al 90 por ciento y que necesitaba de un tramo final por debajo del Lago Oahe, formado de los remanentes del Río Missouri. 

El proyecto es responsabilidad de la empresa Energy Transfer Partners y tiene un valor de 3 mil 800 millones de dólares, pues busca trasladar hasta 470 barriles diarios de crudo de Dakota del Norte a refinerías en Illinois. El freno llega apenas unas horas después de que alrededor de 2 mil veteranos del Ejército estadounidense arribaran al campamento en resistencia en Cannon Ball, para ofrecerse como "escudos humanos" de los manifestantes de la Reserva de Standing Rock, pues este lunes vencía el plazo establecido por la compañía constructora para que los inconformes se retirarán del lugar. 

La principal denuncia se concentra en que el proyecto viola "tierras sagradas" y la latente posibilidad de que un accidente afecte al Río Missouri, lo que se traduciría en una afectación al agua potable de casi 17 millones de personas. La comunidad de Standing Rock comenzó con el movimiento en el 2015 y fue en los últimos meses que los esfuerzos se redoblaron, pues brigadas de niños fueron enviadas a Washington DC para exigir atención al problema. Más de 500 personas han sido arrestadas durante las protestas. 

Sin embargo, los festejos vistos ayer en Cannon Ball podrían no durar mucho, pues además del anuncio de Energy Transfer Partners de interponer una revisión de la resolución, y de dejar en claro que para ellos no existen "otras posibles rutas", el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, declaró la semana pasada a la agencia Reuters que respalda el oleoducto, por lo que su administración podría dar revés a la decisión tomada este domingo.

Con información de AP y La Jornada