España.- La Fiscalía Anticorrupción junto con la Policía Nacional y los servicios de inteligencia investigan al empresario mexicano con una sólida amistad con el expresidente del PRI, Humberto Moreira.

Después de la detención del empresario mexicano Juan Manuel Muñoz Luévano, el registro de su domicilio y de una primera declaración, Muñoz deberá dormir en la cárcel de alta seguridad de Soto del Real por orden del juez José de la Mata, quien advirtió sobre el riesgo de fuga ante la gravedad de los delitos imputados: lavado de dinero y organización criminal.

Lo más novedoso de la investigación iniciada por los fiscales José Grinda y Juan José Rosa es la localización en Madrid de un presunto eslabón vinculado con el blanqueo de dinero procedente del cártel de Los Zetas, mismo que dispondría de una red de sociedad empresarial desde la que llevaban a cabo operaciones financieras delictivas.

El empresario mexicano apodado 'El Mono Muñoz' o 'El Inge', es conocido por su red de gasolineras en Coahuila y por su amistad con el exgobernador Humberto Moreira.

De momento, la policía española en colaboración con un juez radicado en San Antonio, Texas, y los agentes antidrogas de Estados Unidos, señaló una supuesta vinculación de Muñoz con cárteles del narcotráfico.

El denominado caso Moreira en tierras españolas recibió un nuevo impulso, tras detectar la presencia del empresario mexicano en Madrid y decidieron actuar con base en el cúmulo de información que han recabado en torno al propio Moreira y a su presunta vinculación con el narcotráfico.

El fundamento son los datos y el testimonio del testigo protegido preso en San Antonio, Texas, Rolando González Treviño, quien señala a Moreira de incurrir en al menos cuatro delitos, de los cuales sólo dos son competencia de la judicatura española: blanqueo de capitales y asociación delictuosa, mientras la malversación de fondos públicos y cohecho quedarían bajo jurisdicción de la justicia mexicana.

Tanto Moreira como su supuesto socio 'El Mono Muñoz', están siendo investigados en Estados Unidos y España por su presunta participación en la red de blanqueo de dinero que ha tejido el crimen organizado en México.

Con información de La Jornada