Venezuela.- En cien años de actividad petrolera, por primera vez, uno de los grandes exportadores mundiales del crudo y poseedor de las mayores reservas en el planeta, ha tenido que empezar a comprar petróleo. 

Así puede constatarse en la inversión que hizo estatal petrolera venezolana Pdvsa al adquirir en este principio de año un cargamento de 550.000 barriles a la filial en Estados Unidos de West Texas Intermediate (WTI), Citgo Petroleum.

Se estima que la falta de inversión en la industria por largos años forzaron en 2014 a Venezuela a encargar despachos de crudo desde Argelia, Nigeria y Angola. Pero es inédito un pedido de esta naturaleza y con altos costos a Norteamérica, el imperio que desde hace años se configura como el enemigo geoestratégico e ideológico del régimen chavista gobernante hasta la actualidad en el país sudamericano.

De hecho, se calcula que Venezuela produce en la actualidad cerca de 2,7 millones de barriles diarios de petróleo, muy por debajo de los cinco millones que anunciaba el fallecido presidente Hugo Chávez se producirían para esta fecha. 

Esta compra pone de relieve la crisis aguda a la que se enfrenta la economía venezolana, dependiente de los ingresos en divisas procedentes de la exportación de petróleo.

Con información de El País