Uno de los presuntos responsables del tiroteo en las instalaciones del Centro Regional del Interior (IRC, por sus siglas en inglés) de San Bernardino, California, yace muerto en el piso, tras un enfrentamiento con la policía, en imágenes difundidas en redes sociales.

La masacre, que arrojó un saldo preliminar de 14 muertos y 17 heridos, provocó una búsqueda de los sospechosos, que se habían dado a la fuga en una camioneta tipo SUV color negro.

Tras la persecución, agentes de la policía y el FBI se enfrentaron con los presuntos responsables, matando al menos a un par de ellos, de acuerdo a versiones difundidas por Fox News.

Varios comandos de la policía se encuentran buscando a otro sospechoso que aparentemente habría buscado refugiarse en una zona residencial, de acuerdo a versiones difundidas por habitantes de la localidad.