Las autoridades iraquíes exhumaron 470 cadáveres en fosas comunes alrededor de la ciudad de Tikrit, donde el Estado Islámico (EI) ha sido acusado de masacrar a numerosos reclutas en 2014.

A dos meses de retomar la ciudad, las autoridades anunciaron el hallazgo de los cuerpos en cuatro fosas comunes en los alrededores, información confirmada por la ministra de Salud, Adila Hamud, durante una rueda de prensa en Bagdad.

En junio de 2014, varios hombres armados secuestraron a cientos de jóvenes reclutas en la base militar de Speicher, al norte de Tikrit, y los ejecutaron uno por uno, según las imágenes de propaganda difundidas por el grupo yihadista.

Algunos cuerpos fueron lanzados al río Tigris, que pasa por Tikrit, pero la mayoría fueron enterrados en fosas comunes de los alrededores; uno de los emplazamientos contenía 400 cadáveres.

La matanza de Speicher habría causado 1,700 muertos y podría ser una de las mayores atrocidades cometidas por el ISIS, de acuerdo con las estimaciones.

El gobierno ha previsto comunicar la próxima semana los nombres de las primeras víctimas localizadas.

Con información de AFP