El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas escuchó informes de primera mano de médicos sirios sobre ataques con armas químicas en el país, mientras se sopesa la posibilidad de acciones contra los responsables. 

Samantha Power, embajadora estadounidense ante la ONU, informó que el Consejo intentará identificar a los responsables de los ataques y asegurarse de que sean llevado ante la justicia.

Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia, acusan al régimen del presidente Bashar al-Asad de utilizar gas de cloro contra civiles, pero Rusia asegura que no hay evidencia firme sobre la responsabilidad del líder. 

"Todas las pruebas muestran que vinieron de helicópteros y sólo el régimen de Asad tiene helicópteros", indicó Power, sin embargo, añadió que ello debe quedar claro a todos los miembros del Consejo de Seguridad, por ello es importante el avance en la investigación.

El martes la organización Human Rights Watch (HRW) acusó al régimen sirio de haber utilizado en marzo, hasta en seis ocasiones, barriles con gas de cloro como arma química en la provincia de Idleb del noroeste del país que se encuentra bajo control rebelde.

Los 15 miembros del Consejo escucharon el testimonio de un médico sirio que trató a víctimas de un ataque con bomba de cloro en el poblado de Sarmin, en el cual fallecieron seis personas, incluidos niños.

Con información de AFP