En 1939, hace exactamente 75 años se inició la Segunda Guerra Mundial cuando Adolf Hitler declaró que soldados regulares polacos habían disparado contra el territorio alemán.

Comandos de las SS habían fingido un asalto en contra de la emisora Gleiwitz en la región de Alta Silesia, lo que sirvió de justificación a los militares alemanes nazis para intervenir en Polonia, sin embargo, en pocos días Gran Bretaña y Francia se aliaron a la invadida, con lo que se inició la segunda gran guerra, la cual marcó el inicio de la caída de Hitler.

La canciller federal de Alemania, Angela Merkel, destacó la importancia histórica de la fecha, la cual coincide con el arribo de un polaco, Donald Tusk, a la presidencia de la Comisión Europea (UE).

Merkel recordó que el 1 de septiembre de 1939 Hitler lanzó un bombardeo sobre la ciudad de Danzig, con el objetivo de anexar a Polonia a territorio alemán, en una época en que el Führer se sentía omnipotente.

Durante la conmemoración Merkel abordó el tema de Rusia, país que amenaza con desplazar sus fronteras mediante el uso de la fuerza en el este de Ucrania

Hace cinco años, 20 presidentes y primeros ministros europeos se reunieron en la Península de Westerplatte, cercana a Danzig, donde se proyectaban esperanzas para Europa, con el primer ministro ruso, entonces, Vladimir Putin.

El primer ministro polaco Tusk, declaró que es indispensable que el 1 de septiembre de 1939 no se vuelva a repetir, por ello demanda acción frente al conflicto de Rusia, Ucrania y la Unión Europea.

El 3 de septiembre de hace 75 años, Gran Bretaña dio un ultimátum a las tropas alemanas: se retiran o se iniciará la guerra; lo que empezó como una campaña en contra de Polonia terminó transformándose en una guerra al interior de Europa.

Hitler cometió el error de atacar Francia, deslumbrado por las victorias en contra de Polonia, aunque logró hacerse del territorio galo, fue demasiado lejos al iniciar la guerra de aniquilación en contra de la Unión Soviética, a una velocidad que los soldados alemanes empezaron a resentir.