La sonda Rosetta terminó su misión de 12 años en el cometa 67P con un aterrizaje forzado.

Tras 10 años de viaje y dos años de estudio al cometa de 4 kilómetros de ancho, la sonda concluye su última maniobra de investigación en el espacio exterior, enviando imágenes cada vez más detalladas sobre el encuentro.

De acuerdo con la Agencia Espacial Europea (ESA), responsable de la misión, el aparato concluyó su periodo de vida útil con el descenso al cometa y aunque algunos sistemas podrían continuar funcionando tras el impacto, el software apagó todo al momento.

La importancia de la labor de la sonda recae en que los científicos consideran a los cometas como restos intactos de la formación del Sistema Solar y por ende, información de primera mano sobre las condiciones de hace 4,500 millones de años.

“Gracias Rosetta”, dijo el director general de la ESA, Jan Woerner, a través de un tuit.

Con información de BBC en Español y Reuters