14 marcas francesas han demostrado que Victoria's Secret no es lo único que existe en el mundo de la lencería, y es que decidieron hacerle una competencia sana al desarrollar un desfile donde no fue necesario contratar famosos ni gastar millones, solamente demostrar el talento y la belleza de cada una de sus piezas.

Hay que hacer hincapié en que la marca estadounidense realizó su famoso desfile anual el año pasado en París, donde más de 50 millones de personas disfrutaron el evento que se transmitió en diversas plataformas.  Sin embargo, este domingo, durante la Semana de la Moda, se realizó el desfile  “Lingerie, mon amour”, el cual nos trajo un poquito del glamour sobrio, elegante y coqueto de las firmas galas.

En este desfile no se necesito de una Lady Gaga o un  Bruno Mars para acompañar las colecciones, bastó una orquesta de música clásica y electrónica para darle un sentido diferente a cada prenda.

Las modelos se vistieron de María Antonieta, con pelucas blancas y crinolinas, agitando joviales unos abanicos en una imaginaria corte de Versalles. Homenajearon a Dior y su “New Look” de posguerra, y mostraron las colecciones más sexys al retirarse una chaqueta negra de esmoquin, a lo Yves Saint Laurent.

La idea de que la mujer “compra lencería para seducir o para una cita es parcial. Lo hace primero por ella misma y para sentirse bien”, afirmó a la AFP el vicepresidente de ventas regional de Chantelle, Alain de Rodellec, al ser preguntado por el carácter abiertamente seductor de los desfiles de Victoria’s Secret.

Lo cierto es que esta pasarela abrió los ojos del mundo entero  a nuevas posibilidades de lencería, algo que da empuje a las marcas para ser consideradas como un producto de moda y no sólo como ropa interior.

Con información y fotos de AFP.